El presidente Andrés Manuel López Obrador continúa acumulando sentencias en su contra por haberse involucrado de manera ilícita en las elecciones desde sus conferencias ‘mañaneras’.
Este jueves recibió siete sentencias más por el mismo número de conferencias que esta vez incluyen a Elizabeth García Vilchis y al gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal.
El PAN denunció un paquete de 11 mañaneras de febrero y marzo en las que acusaron que el presidente Andrés Manuel López Obrador y otras personas del servicio público violaron la Constitución al incumplir con su deber de neutralidad, imparcialidad y equidad en la contienda; uso indebido de recursos públicos y difusión de propaganda gubernamental prohibida.
Este jueves, la Sala Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) resolvió darles la razón en siete conferencias, en las que se acreditó que López Obrador sí buscó influir en el electorado, para lo que utilizó indebidamente recursos públicos.
En el primer paquete de mañaneras, la oposición señaló las conferencias del 12 al 16 de febrero, del 20 y 21 del mismo mes. Lo que se acreditó en las conferencias del 12, del 16 y del 21 “por haber realizado pronunciamientos de carácter electoral y no conducirse con la prudencia discursiva que conforme a los criterios de la Sala Superior, son exigibles al titular del Ejecutivo federal”.
En la del mismo 21 de febrero, se acreditaron ilícitos de Elizabeth García Vilchis por sus expresiones en la sección de ‘quién es quién en las mentiras’.
En esa conferencia, la funcionaria se involucró en la contienda electoral en defensa de la candidata presidencial de Morena, Claudia Sheinbaum, y a Clara Brugada, que contendía por la Ciudad de México, desde el espacio que tiene los miércoles en las mañaneras, con uso de recursos públicos.
Vilchis acusó que “es tiempo de zopilotes digitales” y acusó a la oposición de “orquestar y alimentar guerra sucia contra el presidente Andrés Manuel López Obrador y la candidata presidencial Claudia Sheinbaum” y señaló que había una estrategia para intentar afectar a “Sheinbaum y Brugada”.
Mientras que en otro caso se acumularon las denuncias en contra de las mañaneras del 7, 11 y 12 de marzo por propaganda gubernamental, y la del 13 de marzo por violación a la Constitución y uso indebido de recursos públicos. Ilícitos que se acreditaron en las cuatro.
Estas conferencias implican la que el presidente ofreció desde Tamaulipas en donde participó el gobernador morenista Américo Villarreal quien destacó logros de gobierno con apoyo de la federación, como disminución en índices de inseguridad, apoyos empresariales, desarrollo económico y bienestar social.
Por lo que se acreditó que “dieron a conocer logros, acciones, programas y líneas de gobierno, con la finalidad de generar adhesión y aceptación en la ciudadanía y porque además, se advirtió que en ellas ase abordaron temas político-electorales”, razón por la que se ordenó dar vista al Congreso de Tamaulipas para que sancione al gobernador.
Pero además, también aprobaron acreditar que el presidente incumplió las medidas cautelares que le impuso el Instituto Nacional Electoral pues días antes le ordenaron parar en sus intervenciones y lo siguió haciendo.
“La Comisión de Quejas y Denuncias del INE había advertido que se abstuviera bajo cualquier modalidad y formato, de emitir opiniones, comentarios o señalamientos sobre temas electorales, cuidando que su actuar se ajustara a los principios constitucionales de imparcialidad y neutralidad”.
El presidente, García Vilchis, el gobernador de Tamaulipas y todos los funcionarios involucrados en al organización y difusión de las conferencias, podrán recurrir a la Sala Superior del Tribunal Electoral para impugnar esta resolución.
Tomado de milenio.com